Al borde de la vereda
en la grieta de un cordón
una bella flor despliega
su fragancia y su color.
Rodeada de un manto gris
de cemento y adoquines
esta belleza demuestra
cumplir con sus berretines.
Se propuso florecer
donde escasea la tierra
desafiando su destino
contra viento y marea.
Y un día fue realidad
incontrastable y flagrante
dispuso ser una flor
muy vital y rozagante.
Ruben Edgardo Sánchez, 20 de septiembre de 2014
en la grieta de un cordón
una bella flor despliega
su fragancia y su color.
Rodeada de un manto gris
de cemento y adoquines
esta belleza demuestra
cumplir con sus berretines.
Se propuso florecer
donde escasea la tierra
desafiando su destino
contra viento y marea.
Y un día fue realidad
incontrastable y flagrante
dispuso ser una flor
muy vital y rozagante.
Ruben Edgardo Sánchez, 20 de septiembre de 2014
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