Porque la vida sin prisa
también es muerte sin prisa
y el destino es el final
de un camino de ida.
Por eso vivo de a poco
y también muero de a poco
porque yo sé que la vida
es un viaje sin retorno.
Porque vamos a morir
y mientras tanto vivimos
disfrutamos de la vida
hasta que un día morimos.
Por eso porque la vida
es preludio de la muerte
nuestro tránsito es fugaz
y hay que vivir el presente.
Ruben Edgardo Sánchez, 3 de enero de 1993
No hay comentarios.:
Publicar un comentario