De a poco nuestro satélite va adquiriendo gran tamaño
en breve se verá enorme tras casi setenta años.
Será en las próximas horas cuando esté muy cerca nuestro
casi podremos tocarla y hasta quizá darle un beso.
Se acercará a la Tierra de manera sorprendente
si es que el tiempo lo permite nos veremos frente a frente.
Su plateada desnudez nos dejará boquiabiertos
su brillo nos cegará acaso en algún momento.
Con su luz blanca y radiante y un tamaño sorprendente
qué bella estará la luna ojalá tengamos suerte.
Podremos volver a verla tan grande y tan luminosa
dentro de dieciocho años cuando brille como ahora.
Ruben Edgardo Sánchez, 13 de noviembre de 2016
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