Estabas en blanco y vine a
cubrirte con palabras
no sé si son necesarias para hacerte compañía.
no sé si son necesarias para hacerte compañía.
O si en cambio preferías quedarte en blanco acaso
puedo borrar de un plumazo lo que ahora te escribo.
Pero entonces yo te pido que me digas la verdad
si prefieres soledad en lugar de compañía.
Amiga te pediría que me digas francamente
para ponerme al corriente cuál es tu necesidad.
Porque en rigor de verdad no es mi intención molestarte
sí en cambio recordarte que tienes la potestad.
Por ende la libertad de decidir hoy tu suerte
y me alegro por tenerte siempre a mi disposición.
Al pie de la inspiración que pueda plasmar en versos
sentimientos tan diversos como los que siento ahora.
Y perdona la demora porque sigo escribiendo
aquello que voy sintiendo hasta que al fin digas basta.
O me digas entusiasta
continúa con tus letras.
Ruben Edgardo Sánchez, 27 de julio de 2014
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