De a poco va llegando la
mañana
el tiempo que transcurre
paso a paso
no sé en dónde puse la
almohada
apoyo mi cabeza en tu
regazo.
Te late el corazón como
tambores
me late a mí también y
no lo siento
cuántos latidos son tal
vez millones
percutiendo a la par en
nuestro pecho.
El tracto digestivo algo lento
los líquidos y sólidos
fluyendo
por vísceras y órganos
atentos
al constante fluir del
alimento.
Del techo el aire baja
suavemente
y acaricia las pieles y me
enfado
pues debo levantarme
tristemente
e ir a mi trabajo
cotidiano.
Ruben Edgardo Sánchez, 13
de diciembre de 1995
http://www.mundopoesia.com/foros/temas/cotidiano.653575/
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