Los diez dedos de los pies separados al extremo
crispados de tanto andar tanto camino y sendero.
Un decálogo conforman en un plano paralelo
imagen especular cada pie con cinco dedos.
Bipedestación mediante hacemos descarga a tierra
a través de nuestros pies toda vez que se requiera.
Ellos son muy obedientes nos llevan de aquí a allá
adonde queramos ir con total celeridad.
El suelo es su plataforma de despegue permanente
andan con mucho cuidado para no chocar de frente.
En el límite preciso donde el círculo se cierra
deambulan con liviandad los pies entre cielo y tierra.
Ruben Edgardo Sánchez, 5 de marzo de 2016
No hay comentarios.:
Publicar un comentario